Mientras unas vacaciones por fin se acercan, es hora de preparar el botiquín de emergencia familiar para los pequeños contratiempos que podrían arruinar su merecido descanso. Los Aceites Esenciales ocupan una posición destacada en este arsenal terapéutico altamente efectivo. Uno de ellos será el aceite esencial de Lavanda aspic, al que algunos llaman "el SAMU", ya que es el aceite esencial de dos urgencias (como mínimo), cuyos resultados sacuden tanto la mente cartesianista que uno podría decir que si no es un milagro, es magia, ¡nada menos!
Aceite Esencial de Lavanda Aspic
Descripción
La Lavanda aspic también se llama lavanda macho en contraposición a la lavanda hembra (la Lavanda verdadera u oficinal, cuya unión natural de los dos tipos de lavanda dará lugar al híbrido natural llamado Lavandín. La Lavanda aspic aprecia la suavidad de las zonas meridionales como las garrigas, las laderas áridas y calcáreas, sobre todo si están cerca del mar. Esto se debe a que la Lavanda aspic teme al frío, razón por la cual por encima de los 800 metros de altitud cederá su lugar a la Lavanda verdadera.
Crece en matas alargadas. El tallo que lleva la parte superior florecida de 60 a 80 cm está ramificado (parece una horquilla de 3 ramas). Su inflorescencia en espigas terminales florece a finales del verano. La Lavanda aspic discreta se funde maravillosamente bien en su biotopo rocoso.
Actividad terapéutica de Lavanda Aspic
Su composición bioquímica muestra un equilibrio molecular impresionante que le ofrece múltiples posibilidades de intervenciones diversas y variadas. Así encontramos el 1,8 cineol (eucaliptol) de la familia de los óxidos terpénicos con una concentración del 30%, suficiente para la acción anticatarral, expectorante aprovechada en sinusitis, otitis, resfriados, gripe, bronquitis... Encontramos también un 30 a 35% de alcoholes terpénicos con propiedades antiinfecciosas de amplio espectro para aliviar las infecciones de las vías respiratorias, pero sobre todo las afecciones dermatológicas: micosis, herpes, herpes zóster, heridas infectadas, quemaduras, picaduras, etc. El alcanfor está por debajo del 10% y no debe asustar a aquellos que rechazan las moléculas cetónicas. De hecho, cualquier aceite esencial cuyos cetonas no superen el 10% se considera seguro para todo tipo de pacientes. Más bien, aprovechemos los beneficios mucolíticos, cicatrizantes y analgésicos de esta molécula de referencia en la bioquímica aromática.
No podemos pasar por alto la actividad extraordinaria de la Lavanda aspic para controlar los riesgos de picaduras de animales venenosos (avispa, abeja, serpiente, medusa). Su acción es excepcional y el resultado está garantizado siempre que se actúe de inmediato con aplicaciones repetidas cada 2-3 minutos durante media hora y en estado puro (sin diluir). Y todo esto sin que la bioquímica pueda explicar científicamente estas curaciones notables. Probablemente un espíritu abierto dirá que es cuestión de totalidad molecular.
El mismo razonamiento puede aplicarse a su acción analgésica notable. De hecho, el linalol es antinociceptivo y el alcanfor también lo es. En otras palabras, estas moléculas se fijarán en ciertos receptores del dolor diseminados a nivel cutáneo, muscular, visceral... Luego los estimularán hasta tal punto que se obtendrá una desensibilización de estos receptores. Desde ese momento, el paciente ya no percibe ni siente dolor. Mecanismo analgésico aún más reforzado por la presencia de terpeno también analgésico.
Entendemos muy bien el carácter indispensable de su presencia cercana para actuar sobre síntomas traumáticos accidentales. Por su acción comprobada en el 100% de su uso, forma parte del trío ganador de los Aceites Esenciales de todo viajero o situación expuesta a diversos riesgos.
Al hablar de su uso, podríamos subrayar esta evidencia porque todo está dicho en su denominación francesa y latina. ¿Qué es un aspic? ¡Una víbora, por supuesto! Esta serpiente vive en las mismas rocas que la Lavanda aspic. Viejos grimorios revelan así que cualquier provenzal que paseara por la garriga, si fuera mordido por esta serpiente, debía recoger las flores de esta lavanda silvestre y frotarlas en estado fresco sobre el lugar de la mordedura para liberar la esencia que neutralizaría el veneno animal.
Indicaciones terapéuticas del Aceite Esencial de Lavanda aspic
Quemaduras solares y otras quemaduras superficiales
En primer lugar, siempre enfriar el tejido cutáneo expuesto al riesgo de quemadura colocándolo bajo un chorro de agua (del grifo, por ejemplo, durante 5-10 minutos) y luego, después de secarlo, aplicar cada 5 minutos durante media hora el número de gotas de aceite esencial puro de Lavanda aspic suficiente para cubrir la zona cutánea lesionada.
Después, 3 aplicaciones al día de la siguiente mezcla:
- Aceite esencial de Lavanda aspic: 2 ml;
- Aceite Esencial de Lavandín super: 2 ml;
- Aceite Esencial de Tanaceto anual: 1 ml;
- Aceite Esencial de Menta piperita: 1 ml;
- Aceite Vegetal de Calófilo: 4 ml;
- Gel de aloe vera o Manteca de karité: 40 gramos.
Bronquitis, sinusitis, otitis
- Aceite esencial de Lavanda aspic: 2 ml;
- Aceite esencial de Ravintsara: 3 ml;
- Aceite esencial de Tomillo CT tujanol: 3 ml;
- Aceite esencial de Clavo de olor: 2 ml;
- Aceite vegetal de Albaricoque: 15 ml.
Otitis: 2-3 gotas en masaje peri auricular y/o en un mechón de algodón para colocar en el conducto auditivo hasta 3 veces al día, durante 5 días.
Sinusitis: 2-3 gotas en masaje sobre la frente o en el lugar de la infección, 4-6 veces al día durante 5-7 días y/o 8 gotas en agua hirviendo de un inhalador, 2 veces al día durante 5 días.
Bronquitis: 15-20 gotas en el pecho o la parte superior de la espalda 6 veces al día durante 10-15 días.
Y por vía oral, Orégano + en cápsulas a razón de 2 cápsulas 3-4 veces al día durante las comidas, durante una semana.
Picaduras, mordeduras de todo tipo (mosquito, tábanos, avispas, medusas)
- Aceite esencial de Lavanda aspic: 2 ml;
- Aceite esencial de Menta piperita: 1 ml;
- Aceite esencial de Tanaceto anual: 1 ml;
- Aceite vegetal de Hipérico: 10 ml.
4-6 aplicaciones locales en la afección 4-6 veces al día durante 3 días (máximo).
Heridas infectadas
- Aceite esencial de Lavanda aspic: 2 ml;
- Aceite esencial de Clavo de olor: 1 ml;
- Aceite esencial de Árbol de té: 1 ml;
- Aceite esencial de limón: 1 ml;
- Aceite vegetal de Hipérico: 5 ml;
- Manteca de Karité: 50 gramos.
2 aplicaciones locales al día en la herida durante una semana.
Uso del Aceite Esencial de Lavanda Aspic en la vida cotidiana
Lucha contra los piojos
El Aceite Esencial de Lavanda aspic puede ser una solución eficaz para combatir los piojos, sin recurrir a productos químicos irritantes o potencialmente peligrosos. Gracias a sus propiedades antisépticas e insecticidas, elimina los piojos actuando directamente sobre su ciclo de vida.
Para prevenir los piojos, simplemente agregue dos gotas de aceite esencial de lavanda aspic a su dosis habitual de champú. Luego, use un cepillo impregnado, también, de dos gotas de aceite esencial y peine suavemente. Este método, tanto perfumado como efectivo, contribuye a repeler los piojos y mantener su cabello saludable.
Gestión del estrés, trastornos del sueño, ansiedad
La Lavanda verdadera es un aceite esencial cuyo consumo regular puede contribuir realmente a reducir el estrés, la ansiedad y mejorar la calidad del sueño. Sus propiedades relajantes y calmantes alivian las tensiones nerviosas y promueven una profunda relajación.
Para beneficiarse de los efectos terapéuticos de este aceite esencial contra el estrés y la ansiedad, simplemente agregue unas gotas en un difusor o dilúyalas en un aceite vegetal para un masaje relajante antes de acostarse. Este método le ayudará a relajarse y encontrar un equilibrio interior.
Artículo escrito por Dominique Baudoux, fundador de la aromaterapia científica Pranarôm.
